A veces uno tiende a quejarse por cosas pequeñas.
Obviamente, uno NO las ve pequeñas, sino todo lo contrario: importantes, cruciales, ¡¡relevantes!! Hasta que llega otro con problemas realmente serios y ahí tus quejas se vuelven insignificantes.
Aquí les presento a Berni, una de las cabraslesas. Ella es rica, inteligente y lesbiana ¡a mucha honra :D! En este capítulo sale un poco tristona, pero seguro que su ánimo repunta más adelante.